Dos efectos son apreciables a las longitudes de onda más cortas: (1) la resolución
máxima debida a la difracción únicamente se vuelve muy fina, y (2) el diámetro de
coherencia de la atmósfera disminuye. Actualmente, los sistemas de OA no tienen
bastantes actuadores para corregir eficazmente en el visible y en el infrarrojo muy
cercano.