Observación directa
Las observaciones desde la Tierra con cualquier longitud de onda superior a 5
son perturbadas por la
radiación térmica
terrestre. Requieren la capacidad de distinguir los fotones provenientes de la fuente celeste y de los
correspondientes al medio ambiente
caliente. Se consideran en este grupo el cielo, el
colector, el instrumento (el detector tiene que estar lo suficientemente frío como para no
deslumbrarse).
La observación de Júpiter alrededor de 10 micrones conduce a una
imagen
donde la mayor parte de la señal proviene del cielo.
Sustracción del fondo del cielo
De esta manera es necesario sustraer el fondo del cielo. Se puede realizar moviendo muy
rápidamente (con una frecuencia de varios Hz) un espejo para apuntar alternativamente el
objeto y el cielo justo al lado. En la cadena de adquisición de un telescopio, se suele utilizar el
espejo secundario, llamado así secundario vibrante.
Sustracción del fondo del cielo promedio
La sustracción del fondo del cielo promedio permite además conseguir una
imagen de mejor calidad
.
Esta imagen se consigue apuntando el telescopio entero con una frecuencia más baja.